El expresidente Mujica de Uruguay murió este 13 de mayo a los 89 años, tras enfrentar una etapa terminal de cáncer. El mundo despide a un referente latinoamericano de humildad y coherencia
José
Alberto “Pepe” Mujica falleció este martes 13 de mayo a los 89 años, en su
chacra a las afueras de Montevideo. Según informó su esposa, la
exvicepresidenta Lucía Topolansky, el exmandatario recibió cuidados paliativos
durante sus últimos días, luego de decidir no continuar con tratamientos contra
el cáncer de esófago que se había extendido a su hígado.
En
enero de 2025, Mujica compartió públicamente el avance de su enfermedad. En una
entrevista al semanario Búsqueda, confesó con honestidad: “El cáncer en el
esófago me está colonizando el hígado. No lo paro con nada”. Aceptó con
serenidad el final de su vida, afirmando: “Me estoy muriendo y el guerrero
tiene derecho a su descanso”.
Presidente humilde y transformador
Durante
su mandato entre 2010 y 2015, Mujica lideró una serie de reformas que marcaron
a Uruguay. Legalizó el matrimonio igualitario, despenalizó el aborto y reguló
el cannabis, convirtiendo al país en un ejemplo progresista en América Latina.
Todo esto, mientras vivía con sencillez, cultivando su huerta y donando gran
parte de su salario.
Antes
de llegar a la presidencia, Mujica fue parte del Movimiento de Liberación
Nacional-Tupamaros y pasó casi 15 años en prisión durante la dictadura
uruguaya. Esa etapa lo marcó profundamente, reforzando su compromiso con la
justicia social, la democracia y la paz. Su vida fue un ejemplo de lucha,
resiliencia y esperanza.
Mujica
es recordado por hablar con honestidad, sin protocolos innecesarios. Su
discurso era directo, sencillo y cargado de contenido humano. Vivió como
pensaba, sin lujos ni privilegios, lo que le valió admiración dentro y fuera de
Uruguay. Fue una figura ética y coherente en un tiempo de grandes
contradicciones políticas.
Legado de Mujica que trasciende fronteras
El
expresidente fue reconocido internacionalmente por su trayectoria. En diciembre
de 2024, el presidente colombiano Gustavo Petro le otorgó la Cruz de Boyacá, la
más alta condecoración civil de Colombia. Mujica inspiró a líderes y ciudadanos
con su visión del poder como herramienta de servicio.
Hasta
sus últimos días, Mujica mantuvo su influencia dentro del Frente Amplio,
coalición de izquierda que actualmente gobierna Uruguay con Yamandú Orsi como
presidente. Orsi lo despidió como “un referente y conductor que nos deja un
legado invaluable”, reflejando el cariño y respeto que despertaba en su país.
En
uno de sus últimos mensajes públicos, Mujica llamó a los jóvenes a valorar la
vida: “La vida se te escapa minuto a minuto, lucha por vivirla”. Esa filosofía
sencilla y profunda resume su pensamiento: vivir con dignidad, compartir,
luchar por un mundo más justo.
Hasta siempre, Pepe
El
mundo despide a José “Pepe” Mujica como a un hombre que hizo de la política un
acto de amor y servicio. Su legado no sólo se mide en leyes, sino en la
inspiración que sembró en millones de personas. Hasta siempre, Pepe.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por su comentario. Radio Camoapa "al servicio de la comunidad"